Como auténticos profesionales que somos,
debemos utilizar todas las herramientas necesarias que nos sirvan de ayuda para
desarrollar mejor nuestra labor, y entre ellas contamos con el Counseling, que
significa consultoría psicológica de apoyo para la mejora, la prevención, el
cambio y el desarrollo personal. Y que se caracteriza por tareas de
asesoramiento, orientación y acompañamiento, además de aconsejar, a personas en
situaciones de crisis o conflictos y en sus búsquedas del bienestar y sentido.
El Counseling está orientado hacia el
profesional que quiere crecer y ser más útil o mejor apoyo de los pacientes,
potenciando nuestra empatía, nuestra aceptación y nuestra autenticidad, siempre
orientado nuestro crecimiento en la mejora de nuestra relación con los
pacientes. Esta tendencia natural al crecimiento puede ser desplegada a partir
del encuentro con otra persona, en este caso el profesional del Counseling.
El Counseling se basa en la capacidad innata
del individuo para lograr los mejores condicionantes que hagan que su vida sea
lo mejor posible, siempre a través de la autoconfianza y del positivismo en
toda circunstancia, centrado en la propia persona, con una total confianza en
su capacidad innata para encontrar los recursos necesarios para vivir su vida
de la mejor manera posible.
Primeramente tenemos que dejar que nos enseñe
un auténtico profesional del Counseling, el Counselor, y entonces, y sólo
entonces, sabremos aplicar de verdad nuestras enseñanzas en los pacientes.
Poseemos una tendencia vital y común a todo lo
vivo, que nos compele al crecimiento, y a la actualización de los potenciales
inherentes a nuestra especie. Nos desarrollamos como somos por la aparición
evolutiva de lo humano social, que nos compele a la adaptación y permite el
despliegue de nuestros potenciales, gracias a que también poseemos la
posibilidad de desobedecer y desde allí crear y crearnos.
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